miércoles, 25 de abril de 2012

Greetings from Severna Park


Corría el año 1984, el de las Olimpiadas de Los Ángeles, y mis padres me enviaron a Severna Park (Maryland) en la Costa Este de Estados Unidos para aprender inglés durante el mes de Agosto.

Recuerdo que era el año de Born in the USA de Bruce Springsteen y el de Victory de los Jackson Five, así como el de Reckless de Bryan Adams.







De Born in the USA me gustaba especialmente Bobby Jean, sobre una amistad de infancia rota por la muerte, y de Reckless, Summer of 69, que compartía esa sensación de pandilla empezando a tocar en un grupo, así como la melancolía cuando desde la edad adulta se echa la vista atrás para hacer recuento de pérdidas y ausencias.






Estas dos canciones enlazan con lo que me encontré en Severna Park, una cuadrilla de amigos viviendo en una zona residencial de casas de madera de dos alturas, a medio camino entre Washington y Baltimore donde vi un partido del equipo local de béisbol, Los Orioles, Nueva York quedaba a tres horas de bus.

Se juntaban en el sótano de la casa del que tenía la batería y ensayaban para más tarde desperdigarse con sus chicas por los dormitorios de la planta de arriba.

De allí me traje algún obsequio en formato vinilo del padre de la casa donde vivía, Chicago, Electric Light Orchestra y Rod Stewart.




Y también grabé cintas / cassettes de grupos como Pink Floyd, Led Zeppelin, Aerosmith, Motley Crue, Rush, Jimi Hendrix, Doors.

Led Zeppelin, en concreto, tenía sorbido el seso a aquella cuadrilla de chavales, que flipaban con los solos de Jimmy Page.






Mis amigos norteamericanos formaban parte de la Generación X que creció con el Grunge.

Para matar al padre, acabarían desdeñando los solos de guitarra y las canciones de largos desarrollos instrumentales.

Saludos desde el verano de 1984 en Severna Park.

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